La crítica norteamericana la destrozó al decir que la actuación de Johnny Depp, con el personaje de El Toro, supera por mucho a la de Armie Hammer con John Reid, y quien ostenta el personaje principal... y tenía razón.
El multifacético de Depp logra una vez más cautivar al público con un personaje nativo que recuerda mucho a su Jack Sparrow, en Piratas del Caribe: un personaje cómico pero serio, inteligente pero despistado.
Esta comparación hace que muchos amantes del cine vean con mala cara a El Toro. A mí no me parece así.
El Llanero Solitario ofrece al público una trama entretenida, llena de aventuras, con buenas actuaciones y con una pizca de buen humor.
Solo bastó sentir el ambiente en la sala cuando fui a verla y me di cuenta de que la gente la disfrutó y se río, principalmente los niños, quienes son introducidos a la vida de dos personajes que, por buscar erradicar la corrupción en Texas, se involucran en aventuras que les cuestan lesiones en el cuerpo.
El Llanero Solitario fue una gran apuesta de Walt Disney y le costó caro, tanto que en su estreno en Estados Unidos no recaudó ni el 10 por ciento de lo que se le invirtió en la producción y en la publicidad, y dudo mucho que en el mercado extranjero lo logre.
Lo único que puedo decir es que es una película palomera para este fin de semana, que bien vale la pena ser vista en formato digital o en 3D, de acuerdo con los gustos.
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