Capitán Phillips, película protagonizada por el favorito de Hollywood, Tom Hanks, cumple con su objetivo principal: entretener.
La película, que el fin de semana pasado se estrenó en México y que en menos de una semana ha recaudado en taquilla más de 11 millones de pesos, no solamente complace al Cinéfilo, sino que lo lleva más allá, lo toma de la mano para contarle la historia de un capitán que, durante el 2009, fue secuestrado por unos piratas africanos que lo hicieron pasar los peores momentos de su vida.
Capitán Phillips tiene suspenso, miedo y frustración, sin tocar líneas emocionales de felicidad, solamente cuando llega a su punto final y el desenlace es mostrado.
Muchos consideran que la trama es por demás exagerada, pues prejuzgan a Tom Hanks por su incursión en la Academia, encargada de la entrega del Óscar.
Sin embargo, considero que la película es por demás recomendable y que por supuesto se codeará con las grandes en la próxima entrega de la estatuilla dorada.
Capitán Phillips, dirigida por Paul Greengrass, ya conocido por su temática de suspenso y de acción, tiene eso: acción y suspenso, emociones que tienen al espectador al filo de la butaca con cada escena, con cada grito de ayuda, con cada disparo de violencia, con cada mirada...
La acción empieza en alta mar cuando un grupo de piratas insiste en asaltar y en secuestrar el barco de carga que Capitán Phillips dirige; desgraciadamente lo logran y Greengrass tuvo el reto de contar el hecho real sin caer en la falsedad y en lo barroco, ofreciendo una película interesante y aplaudible.
Tom Hanks se luce en su papel protagónico y deja a un lado al Forrest Gump que lo llevó a lo alto de la cima en 1994, para convertirse en un experto del mar que tiene que luchar por su vida.
Cinéfilos, dejen a un lado sus prejuicios en torno a este actor, que bien ganados se los tiene, y denle una oportunidad, les prometo que Capitán Phillips no los decepcionará.
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